Lectorsillos

domingo, 25 de octubre de 2015

Vivo decepcionada de mí misma y es un sentimiento horrible

martes, 6 de octubre de 2015

No puedo más

Hoy me puse a llorar en la facultad. Nada más para decir de lo desbordada que ando

viernes, 2 de octubre de 2015

Alter ego.

Quiero empezar esta entrada que no sé bien de qué se va a tratar, así supongo que voy a volcar todo. Como siempre, haciendo catársis en lugares donde nadie me lee, o me gustaría me leyeran menos.
Una vez, o unas cuantas mejor dicho, me dijeron que no podía tener nada estable en mi vida porque era demasiado egocéntrica como para centrarme en otras cosas, y sí. La verdad que me cae tarde la ficha pero sí, no puedo cambiarlo. No entiendo cómo, no puedo dejar de pensar en mí mágicamente para pensar en los demás, -más de lo que lo hago, irónicamente-. Ni quiero tampoco, vayamos a lo que es. Me chupa un huevo básicamente todo ser que camina y no soy yo, o a veces no, pero la mayoría del tiempo sí.
Yo estoy pero no estoy. No te leo en la misma frecuencia porque no estoy en la misma frecuencia. Me pierdo en un mundo que no entiendo mucho cuando es real y cuando no. A ver, no es que no distinga realidad de fantasía, pero estoy tan en una bola de algodón, algo así como una nube sería, que no me importa mucho caer tampoco. ¿Para qué? ¿para más de lo mismo?, no.
A veces me preocupo por demás y otras soy totalmente diferente. ¿Qué tiene esto de malo?, dirán, y bueno justamente, es demasiado intermitente el cambio, soy demasiado intermitente. Es un día sí, es un blanco y negro, un sí y un no, un todo y un nada. Me aburrís, me aburre, me aburro de mí misma y quiero cambios y me asustan y vuelvo para atrás, o nunca arranco.
Me quiero dejar ir en la efímera babia más dulce-¿notan que siempre es todo ME, YO, PARA MÍ?. Otra vez, evidenciando la característica que me hace tan yo y tan nadie, egocéntrica como pocos, imbécil como nadie- y no bajar. Tal vez descansar donde la tranquilidad me entre por los huesos y me baje a tierra.