Lectorsillos

domingo, 20 de diciembre de 2015

La máscara alternativa

Sigo pensando quién soy. Casi 20 años y no tengo ni idea, y cuando digo "ni idea" es ni idea. No sé quién soy y me gustaría averiguarlo pero tampoco tengo la certeza de querer, "me gustaría" no es quiero, no afirmo, no desmiento, más bien me miento. Siempre me miento y lo sé. Me engaño conscientemente y dejo que suceda. Me miento todo el tiempo, a toda hora, en todo lugar. Me hago creer una realidad subalterna que no existe. Todo está bien y todo está mal, es arriba es abajo, es allá y acá o acá y allá. Te extraño, te desconozco, me desconozco, no siento nada o siento todo. Ahora... ¿qué siento? No lo sé. No lo quiero saber, quisiera averiguarlo sobre la marcha pero como siempre la incertidumbre se apodera de mi calma y acá estoy, sentada, escribiendo, pensando y no entendiendo qué soy, qué quiero o cuando. Simplemente no lo sé, es lo más básico y de lo que se supone se parte para seguir adelante, y acá estoy yo, que no lo sé.

jueves, 17 de diciembre de 2015

Is it possible to fall in love with a character? 
I guess it is, well, it has to be. Otherwise it means that i'm completely insane and i don't wanna think about it as a chance to be.

martes, 15 de diciembre de 2015

Supo ser un no muy lejano borrador...

Estoy un poco cansada de ser lo que otros quieren que sea. Todo el tiempo esperan cosas de mí que naturalmente no sucederían, pero sí pasan porque yo hago que pasen, porque cambio y me amoldo, me hago versátil, me hago la que no me importa y la que no me cuesta cumplir ciertas expectativas. Las cumplo sí, pero ¿a costa de qué?. ¿Por qué estoy cumpliendo expectativas que no son propias?.
Pongo la mejor sonrisa y finjo que no me cuesta nada y sí, si me cuesta porque es algo que no soy, que no quiero ser, ¿y para qué? para que otros me tengan un poquito más en cuenta y dejar de "sentirme en falta".
Soy, la mayoría del tiempo, lo que no quiero, lo que no me sale, lo que no está conmigo siempre. La constante lucha entre lo que soy y lo que debo, debería, debí ser alguna vez y no puedo. No puedo dejar de estar en el medio de los polos. El ying y el yang, el bien y el mal, el frío y el calor, la paciencia y la ira, la mejor de la clase, la peor de la clase, la buena, la mala, la que se prende a todo, la que no sale de su casa, la amiga y la enemiga.
Yo no quiero enfrentarme a mí misma pero no lo puedo evitar. No puedo porque no me dejan evitarlo, porque quiero correr en la vereda opuesta y me ponen una barrera que me hace volver a donde no quiero. No me dejan no pelear conmigo misma, no me dejan atravesar el umbral, pasar la puerta, quedarme donde estoy. Me obligan a ser, a no ser, a estar, a no estar, a querer, a odiar.
Es el fuego que soy y el humo que emerge cuando me incinero, a mis ideas, a mis convicciones. Es eso que escapa y no puedo retener, eso que es producto de la injuria a la que me someto.
Mi cuerpo y mi mente hacen una cosa y mi alma grita sin éxito desde mis profundidades pero queda acallada por los actos en sí mismos.
No puedo ser ni la más alta, ni la mejor estudiante, ni la mejor amiga, ni la mejor novia, ni la mejor amante. No puedo porque tengo fallas, no soy un sistema perfeccionado, de otra forma sería un robot, alguien mecánico y no lo soy. No puedo serlo, no llego a serlo y nunca voy a ser tan buena, tan linda, tan pacífica, tan tolerable

viernes, 11 de diciembre de 2015

Mind your own business

Me agota que la gente esté tan pendiente de la vida de otros. En serio me agota.
Quizás yo lo hago y lo ignoro -cosa que dudo porque no puedo con mi vida mucho menos con otras, no?- pero no tolero que se rumoreen cosas. Que te insistan con x tema relativo a una persona. No me interesa, no entienden que no me interesa?. No quiero saber con quién se acostaron o se dejaron de acostar, con quién se los vio, dónde, cómo, cuándo, por qué. No quiero saber. En serio y menos si siguen reiterativos con el tema. Y muchísimo menos si involucra a gente que quiero. Ya está. Si esa persona tiene un problema, una vida oculta, por las noches se pone la media calada y canta en un bar, a vos qué te importa?. En serio. Decimelo. No entiendo. Qué te importa lo que hagan? Deja vivir.
Por supuesto no soy ninguna carmelita descalza y confieso he incurrido en el chisme barato y más de una vez. Pero trato a toda costa de evitar comentarios sobre el mismo tema más de una vez. Listo, lo conté, escupí mi verdad -¿mi verdad o la de otros?-, me sometí en el chisme de barrio y conté algo que no me pertenecía, pero así como lo conté murió ahí. No esperen de mí que pase dos meses haciendo alusión al tema. Ya fue. Dejenlo ir.
Tenemos un muy gran problema con dejar ir las cosas. En serio. Como sociedad. Si hay una novedad hablamos meses de lo mismo hasta que salga otra. ¿Tan poco llenamos nuestras vidas como para invertir tiempo y energías en la vida de otro?.
No sé. Diganme loca, falsa, antigua, mandona y malhumorada, pero sepan que prefiero estar ocupandome de mis propios asuntos y no estar en los de otro. Y no sé si lo prefiero eh, aclaro, pero tengo tanto que cambiar y arreglar de MI vida, que sinceramente no tengo tiempo para invertir en otras. Ni energía. Ni mente. Ni ganas. ESO, NO TENGO GANAS.